Como todas las industrias, los seguros se han visto afectados desde el inicio de la pandemia. El sector ha perdido $760 mil millones a nivel mundial en la bolsa de valores, la tercera más alta entre todas las industrias. Sin embargo, su recuperación es cada vez más evidente.
Un nuevo estudio de la consultora estratégica McKinsey, ha determinado que durante los últimos 50 años el mercado de seguros de automóviles parece no haber tenido correlación con la economía. La pandemia puede cambiar la forma en que conducimos, aseguramos y mantenemos nuestro automóvil, sin embargo, un detalle que no ha cambiado es la necesidad de contar con un buen seguro vehicular, incluso durante la restricción vehicular.
Transformación digital
Una gran parte de las pólizas se tramitarán por medios digitales, los vendedores de seguros se han acoplado a los programas y aplicaciones como Zoom o Skype para reunirse con sus clientes. El principal reto del sector será mantener esa cercanía y empatía con sus clientes, y el poder generar una sensación de confianza a través de nuevos canales. Incluso se están desarrollando aplicaciones móviles para: facilitar el acceso a los servicios de aseguradoras, el detalle de planes contratados y facilidades para sumar beneficios al servicio. Se estima que para 2025 más del 90% de todas las comunicaciones con los clientes serán manejadas por chatbots y las aseguradoras no serán la excepción, estos podrán tener una comunicación inteligente con los clientes y ayudarlos con algunos problemas que presenten, adicionalmente podrán completar procesos comunes como la solicitud de pólizas, la presentación de reclamos, estados de cuenta, entre otros.
Cambios en medios de transporte
Las limitaciones en la capacidad del transporte público y el alto riesgo de contagio han incentivado en muchos casos la compra de un vehículo particular, esto quiere decir que la contratación de seguros será vital. Así mismo, en muchos países se ha visto el aumento de ciclistas y las aseguradoras están ideando y adaptando sus coberturas para estos usuarios.
Primas ajustadas a tu necesidad
En Estados Unidos y Europa se está haciendo muy popular la contratación de seguros de automóviles, por tiempos y distancias limitadas; se ha incrementado la necesidad en el consumidor de pagar primas más bajas ya que los vehículos tienen menor uso durante los períodos de confinamiento. Los avances tecnológicos permiten la creación de aplicaciones digitales capaces de medir kilometraje y riesgo, para obtener precios basados en el uso que son más equitativos para el consumidor y más precisos para la compañía aseguradora; incluso existen dispositivos que se instalan en el automóvil y determinan toda la información de uso de este.
Estos dispositivos controlan algunos hábitos de conducción, cómo: aceleración, frenado en curva, kilometraje, tiempo dedicado a conducir, ubicación, entre otros. Esta información se envía a la aseguradora para otorgar un puntaje de manejo: mientras más alto el puntaje, menores serán las primas. Se realiza un seguimiento del puntaje de manejo y hábitos a través del portal en línea de la aseguradora o la aplicación para teléfonos inteligentes.
El nuevo coronavirus ha incidido impactantemente en todos los mercados alrededor del mundo, el sector de seguros vehiculares se está transformando de acuerdo a las necesidades de sus usuarios y sobre todo reinventándose digitalmente en la nueva demanda de servicios en este medio.